“Lo que se observa en el mundo, y también en la región, es la consolidación de grandes empresas conocidas como “superestrellas” cada vez más concentradas, que absorben a pequeñas emprendedoras, reducen la posibilidad de que esos grandes avances tecnológicos se traduzcan en mayor productividad y oportunidades de empleos de mejor calidad y remuneración acordes con las necesidades de la nueva era tecnológica”, señala el estudio de CEPAL “Política de competencia y convergencia de sectores. Tecnologías de la información y financieras”.
El informe revela que las ganancias de los sectores de tecnología, medios de comunicación y telecom (TMT) están altamente concentradas. “Entre 2000 y 2014 el 20% de las mejores empresas capturó el 85% del beneficio económico”, indica el reporte de CEPAL, pero solo “el 5% de las mejores empresas (incluyendo las gigantes tecnológicas como Apple, Microsoft) generaron el 60% del beneficio”.
De acuerdo con el estudio de CEPAL, una de las medidas que se puede aplicar para contrarrestar el dominio de mercado es la “regulación asimétrica temporal” ya que “además de intentar limitar posibles concentraciones de mercado, puede fomentar la entrada de nuevos actores, con nuevas tecnologías, aunque casi siempre son aquellos con las tecnologías superiores los entrantes al mercado”, detalla el documento.
El informe da cuenta que en varios países de la región (Argentina, Brasil, México, Chile, Colombia) se han producido reformas regulatorias e incluso de institucionales, como unificar los temas sectoriales en los Ministerios de Comunicaciones. Sin embargo, se advierte que por ejemplo en México y Argentina, las medidas no lograron los objetivos esperados.
“La reforma de telecomunicaciones de 2013 en México no ha generado la competencia esperada, aunque los precios han caído”, afirma el estudio de CEPAL. El efecto de apertura del sector como emergente del proceso regulatorio no se tradujo en el aumento en la cantidad de actores en el mercado.
En el caso de Argentina, el informe revela que la administración actual eliminó las restricciones al mercado de las empresas de telecomunicaciones. Pero, lejos de estimular la competencia, se advierte “la hegemonía de los incumbentes previos, garantizándoles así la escala necesaria para sobrevivir en este mercado dinámico y demandante permanente de inversiones”. Por eso, algunos actores piden al gobierno la aplicación de una regulación asimétrica para promover la competencia, especialmente en los segmentos de banda ancha y TV paga.
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