La Junta de Supervisión de Facebook (Oversight Board) concluyó que fue correcto suspender la cuenta de Donald Trump en Facebook e Instagram, pero que el bloqueo no debe ser indefinido. “Por la centralidad de las plataformas que alojan el flujo global de información y comunicaciones, la posición de la Junta resulta trascendente e implica un interesante giro en la opaca autorregulación corporativa del discurso público, pero no cuestiona sus raíces”, sostiene el investigador argentino Martín Becerra en este artículo en Letra P.