Google anunció la revisión de su política y herramientas de gestión de la publicidad para que los anunciantes puedan controlar mejor con qué contenidos se vinculan sus anuncios. La iniciativa surge luego de que en Gran Bretaña, compañías como Volkswagen, Toyota, y Nissan, los bancos RBS, HSBC y Lloyds Banking Group, McDonald’s, Domino’s Pizza, O2, L’Oréal, Channel 4, Havas, e incluso el gobierno británico retiraran su publicidad de Youtube por no poder evitar que sus anuncios aparecieran en videos que promueven el odio y contenido ofensivo según informó el diario El País de Uruguay.
“Recientemente tuvimos un número de casos en los cuales los avisos de las marcas aparecieron en contenidos que no estaban alineados con sus valores. Por esto, nos disculpamos profundamente. Sabemos que esto es inaceptable para los anunciantes y agencias que confían en nosotros. Por eso hemos realizado una revisión extensiva de nuestras políticas y herramientas de publicidad….Quiero compartir que ya hemos comenzado a implementar cambios en tres áreas: nuestra política de publicidad, el cumplimiento de estas políticas y nuevos controles para los anunciantes”, aseguró el CEO de Google, Phillip Schindler, a través dell blog de la empresa.
Schindler explicó que “estamos tomando medidas más duras en relación al contenido de odio, ofensivo y degradante. Esto incluye remover anuncios de forma más efectiva de contenido que esté atacando o amenazando gente en función de su raza, religión, género o categorías similares. Este cambio nos permitirá tomar acción, donde resulte apropiado, en una mayor cantidad de anuncios y sitios”.
Otra de las medidas anunciadas por el CEO de Google tiene que ver con la introducción de nuevas herramientas para anunciantes para que “puedan gestionar de modo más fácil y consistente dónde aparecen sus avisos en Youtube y en la web”.
La iniciativa de Google tiene como trasfondo un interés económico ya que, de acuerdo con datos del balance de la compañía, en 2016, Google generó ingresos totales por US$ 90,27 millones y US$ 79,3 millones por publicidad. De los ingresos totales, Gran Bretaña es el segundo mercado más importante después de Estados Unidos. La facturación en dicho país fue de US$ 42,78 millones (47,39%), mientras que en Gran Bretaña fue de US$ 7,78 millones (8,62%) y en el “resto del mundo” contabilizó por US$ 39,70 millones (43,98).
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